domingo, 10 de enero de 2016

El veneno



Sin sensor para el cianuro alzo la copa y brindo mártir del veneno ofrecido.

Tomando la medicina del porvenir prometido.
Venidero destino, alucinógeno amigo del falso camino.

Droga de la casualidad periodo de la ocasión arte de apresar el fluido bebido.

Sin odiar al rival doy el dorso de mi mano dando paso a la jugada sin ocultar la tirada.

Alargo el recorrido  pues no puedo concebir la toxina de este giro.
Sin destreza ni sustento con el somnífero como nutrido me falta la maestría, declino  mi cometido.
Ansío respirar, calmarme ante mi propia extinción  deseo la cura a la expiración.

El antídoto es el olvido el quebrantar del cristal la fractura de la traición el sosiego compasivo.

Desintoxicar, curarse del amante querido es cavar el sepulcro del cianuro obtenido


Ana Vega Artime